martes, mayo 30, 2006

Lo que ocurrió

El horror difícilmente puede ser pensado con los modelos que tenemos a mano. El modelo ilustrado no sólo no ha dado resultado sino que por momentos fue un causante más, como aquél que no pudiendo con su enemigo termina uniéndose a él. Hay que buscar otros maestros, los del dolor, los que le han sobrevivido (al menos en sus escritos) y piensan desde él, los Primo Levi, Jean Améry, Walter Benjamin o Theodor Adorno. La teoría de la comunicación de Habermas, aunque elaborada con el último fin de evitar lo que ocurrió, pasa sobre ello, ignora lo que hay detrás. ¿Quién puede comunicarse cuando la propia palabra está llena de mentira y de muerte? Habría primero que limpiarla, ¿y quién es capaz? Por ahora hay que recordar, integrar esa memoria en nosotros, volver a la lucha que contra el lenguaje mantuvo Paul Celan, volver a oír los gritos de los rehenes que estremecieron a Jean Fautrier, volver a asumirnos como sólo carne. Mario Gómez El cuadro es Tête d'otage, pintado por Fautrier en 1944